Los hermanos Zipi y Zape son enviados a pasar el verano a un internado. Una vez allí comienzan a hacerse amigos de los marginados del centro, ganándose la antipatía de otros alumnos, y con los profesores y vigilantes del centro tampoco tienen mucha más suerte. En el internado se dedican hacer travesuras desde el anonimato, en una de éstas descubren que Falconnetti, el director del centro, tiene un mapa que indica que en la finca se esconde un tesoro.
A Albert Pyunya le hemos visto alguna que otra vez por este blog. Un tipo que empezó muy fuerte con Cromwell, rey de los bárbaros, película que para muchos abrazaba sin rubor la moda de espada y brujería que imperaba en los primeros 80, gracias, sobre todo, al Conan el bárbaro de Milius y Schwarzenegger. Aunque, todo hay que decirlo, el film de Pyun se estrenaba semanas antes. El film acabó siendo un éxitazo en suelo yanki, amasando 40 millones que la convierten en una de las producciones más exitosas rodada al margen de un gran estudio.