martes, julio 28, 2009

Night Club

Night Club era un programa semanal que se emitió en la primera mitad de 2001 en el Canal 33, concretamente de la madrugada del jueves al viernes. Evidentemente con ese horario no lo veía nadie y apenas es recordado hoy en día.
El programa, ideado por Toni Priante, Albert Guitart i Jordi Frades, de corte muy cutre que se componía de varios sketchs con personajes fijos, muchos de ellos interpretados por Toni Priante.
Teníamos la sección Cine Club, donde un presentador con olor a naftalina presentaba películas (muchas de ellas protagonizadas por un muñeco de ventrílocuo), que habían sido remakeadas en Hollywood; había bastantes monólogos de un tal Pitu de la Selva, personaje tremendamente facha y que era curioso como Tv3 no ejercía censura alguna en estos diálogos aún siendo un programa tan marginal.
Este tal Pitu, de vez en cuando, también entrevistaba (a su manera) algún autor literal o personaje de la farándula.

De los programas que tengo grabados he escogido el corte de la sección Clip Club, que, para entendernos, sería la versión videoclipera del programa Que grande es el cine del Garci. En el vídeo se encargan de "analizar" el Me pongo colorada de Papá Levante.
No es que sea el corte más divertido ni el más representativo y poner semejante clip es toda alegoría al suicidio pero la pelirroja de
Papá Levante tenía su aquél, a eso hay que añadirle que la boinita le daba un toque francés muy chic, a lo Laure Sainclair.


jueves, julio 23, 2009

Clásicos Keaton: Las locas peripecias de un señor mamá

Las locas peripecias de un señor mamá, Michael Keaton, Teri Garr, Mr. mom
En 1982 Michael Keaton había debutado en la pantalla grande con Turno de noche, una película pequeñita que fue un exitazo en USA, así que era lógico que su siguiente film fuese hecho a su medida y para su lucimiento. Con lo que un año después, habiendo rechazado el papel que acabaría haciendo Dennis Quaid en Cavernícola, estrenó Las locas peripecias de un señor mamá (Mr. Mom).

Las locas peripecias de un señor mamá, Michael Keaton, Teri Garr, Mr. mom

Jack Butler
es un tipo al que le sonríe la vida, está felizmente casado, con 3 hijos y con un estupendo trabajo como ingeniero en una fábrica de coches. Todo le va fenomenal hasta que una recesión económica hace tambalear la economía y en su empresa comienzan a despedir al personal y, evidentemente, él es uno de ellos, con lo que tendrá que replantearse buscar un nuevo trabajo.
Casi en broma apuesta con su mujer que ella es incapaz de encontrar un empleo antes que él, cosa que conseguirá rápidamente en una empresa de publicidad. Así que mientras ella hace su jornada laboral Jack deberá lidiar con la casa, sus hijos, las vecinas y cualquier quebradero de cabeza que asolan la vida de las amas de casa.

Las locas peripecias de un señor mamá, Michael Keaton, Teri Garr, Mr. mom
Las locas peripecias de un señor mamá
destila humor ochentero por cada uno de sus poros, un humor que aún teniendo ese toque de moralina tan yanki no llega a molestar, con mucho ritmo (cosa que ayudan sus ajustados 90 minutos) y eso que el argumento del film se acaba a la media hora, todo lo que viene después son los gags del personaje puramente masculino que se ve entre pañales, en la cola del super, yendo con sus vecinas a una sala de striptease masculino o jugando con éstas timbas de poker mientras se apuestan cupones de descuento del super
.

Curiosas son las referencias a otras películas que aparecen en el film, a saber: La matanza de Texas, Tiburón, E.T., Carros de fuego en la clásica escena de una carrera o Snoopy, ya que uno de los niños siempre lleva a cuestas una mantita como lo hacía Linus o el mismo niño aparece en un momento dado con un casco idéntico al de Vicky el vikingo. Aunque la película que más se menciona es Rocky, ya que el personaje de Keaton no para de usarla para hacer comparaciones con la vida y los currantes de la fábrica se cachondean de ella.


Las locas peripecias de un señor mamá, Michael Keaton, Teri Garr, Mr. momFueron a su casa, preguntaron donde ponían el microondas,
le llenaron el mueble de la tv de trastos, se fueron y lo dejaron así


Aparte de Keaton en el film aparecen otros rostros bastante conocidillos. Teri Garr hacía de su mujer; Martin Mull es el jefe de ésta; y los compañeros de trabajo de Keaton son Christopher Lloyd y Jeffrey Tambor.

La peli, nacida bajo el amparo del todopoderoso Aaron Spelling, la dirigió
Stan Dragoti, que había hecho Amor al primer mordisco, una basura con George Hamilton, y después del film aquí comentado El hombre con un zapato rojo con Tom Hanks para luego hundirse en la miseria con películas de Tony Danza y Scott Bakula.

Pero lo importante no era el director, si no el guionista, el grandioso John Hugues que, antes de Mr. Mom, ya había escrito cositas para la National Lampoon. Lo que vino después, ya fuese como director o guionista, es historia: Las vacaciones de una chiflada familia americana, 16 velas, El club de los cinco, La mujer explosiva, La chica de rosa, Todo en un día, Solo en casa o Tu novio huele mal por decir algunas. Viendo la lista está más que claro que los trabajos de este señor influyeron de sobremanera a los que fuimos niños/adolescentes en los 80.


Las locas peripecias de un señor mamá, Michael Keaton, Teri Garr, Mr. momLas locas peripecias de un señor mamá, estrenada en verano del 83, tuvo muchísimo éxito en USA, recaudando más de 60 millones de dólares de la época y siendo la novena película más taquillera de ese año. Año en el que se estrenarían producciones del calibre de El retorno del Jedi, Flashdance, Octopussy, Supermán 3 o Tiburón 3D.
 

lunes, julio 20, 2009

Bitelchús, Beetlejuice, Betelgeuse

Bitelchús, Beetlejuice, Betelgeuse, Michael Keaton, Tim Burton
Ya que los señores de la Warner no se dignan hacer una edición en condiciones de Bitelchús y lo único que sacan son tres cochambrosos episodios de la serie de dibujos y un miserable trailer (que si fuese el japo todavía lo pasaría por alto) rebusco en los VHS y subo unas entrevistas sobre el film. En realidad es un fragmento de una serie de documentales que se hicieron en el 99 dedicados a diferentes directores, el del vídeo pertenece al que le brindaron a Tim Burton (que el bueno de Sergi tuvo a bien grabarme del Canal Satélite hará 7 años); en él hay charlas con el propio director, Martin Landau y Michael Keaton.

lunes, julio 13, 2009

El gnomo de Girona (En los límites de la realidad)

gnomo girona, en los límites de la realidad, Aberasturi, Jiménez Oso, Sebastia D'Arbo
Bien es sabido que en verano la programación televisiva cae bajo mínimos y eso que el resto del año también es malísima. Así que en época estival nos brindan con la enésima reposición de Punky Bruster, La tribu de los Brady y demás morralla. Otra variante son programas nuevos con el simple propósito de llenar la parrilla.

En verano del 93 Antena 3 nos metió un programa dedicado a fenomenos paranormales, fantásticos, etc., llamado En los límites de la realidad y presentado por Andrés Aberasturi, que intentaba seguir la estela de los que realizó en su día Jiménez del Oso. El programa siempre tenía la misma estructura, se explicaba un caso recreado de forma ficticia y luego una serie de "expertos" hablaban sobre el tema intentando aportar un poco de luz. No he visto ningún programa de Iker Jiménez pero me parece que también tiene una estructura similar.


El vídeo de esta semana, sacado de las cintas de VHS, es uno de estos casos, concretamente al de un supuesto gnomo encontrado en un bosque de Girona. Por ahí tenemos al inefable Sebastià D'Arbó emocionado por el diminuto ser y al pobre Aberasturi perdidísimo, apalancado en su sillón a lo Bertín Osborne en Contacto con tacto y lanzando chascarrillos (presuntamente llenos de comicidad) mientras se carga la poca atmósfera del programa.




viernes, julio 10, 2009

Cariño, he encogido a los niños

Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston
Aunque parezca mentira las cabezas pensantes que hay detrás de este film son ni más ni menos Brian Yuzna y Stuart Gordon. Sí, los mismos que están detrás de la saga Re-animator, El dentista o la Fantastic Factory. ¿Y qué diantres hacen estos amigos del gore ochentero en una, todo hay que decirlo, pastelosa producción Disney?

En la época de Resonator, Yuzna y Gordon hablaron de la posibilidad de meterse en una producción infantil y se les ocurrió la idea de un grupo de chavales diminutos que tienen un montón de aventuras, así que con la ayuda de Ed Naha, guionista de Dolls y Troll, escribieron un primer guión (que en aquel momento se titulaba Teenie Weenies) y se lo presentaron a la Disney. Para su propia sorpresa aceptaron financiarlo y así es como Stuart Gordon se convertía en su director y Yuzna en el productor.

Pero antes de empezar el rodaje y ante las dudas que tenía Disney de la viabilidad de los efectos especiales decidieron rodar alguna secuencia a modo de prueba. Para eso contrataron a Thomas G. Smith, que venía de la Industrial Light and Magic y que acabaría siendo productor ejecutivo de la peli aquí reseñada, que filmaría dos secuencias: una donde los protagonistas montaban una hormiga y otra donde trepaban por el envoltorio de un caramelo. El resultado fue satisfactorio y Disney dio luz verde al rodaje.

 Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston

Ante la cantidad de decorados y efectos que necesitaban decidieron rodarla en Méjico, en los famosos Estudios Churubusco, que ya habían albergado rodajes de la talla de Dune, Desafió total o 007 Licencia para matar.
En Churubusco pudieron montar las pantallas para el blue screen más grande hasta la fecha, toda la urbanización donde viven los protagonistas (iglesia incluida) y, por supuesto, los decorados a escala gigantesca, como el bol de cereales y sus 60 mil litros de leche artificial, la galleta gigante (que estaba hecha de auténtica crema) o la hierba de 12 metros de altura fabricada con espuma de uretano.

A todo eso hay que añadirle los diferentes técnicos para los efectos, entre ellos David Allen, que empezó en la mítica Flesh Gordon para pasar a engrosar la lista de la ILM y acabar sus días en la Full Monn de los Band, que se encargó de algunas escenas en animación stop motion, pero él no rodaría la secuencia de la lucha entre la hormiga y el escorpión, de eso se encargaría, aunque sin acreditar, otro experto en la técnica, Phil Tippett.
Por supuesto había una hormiga a escala real, la cual tardaron 5 meses en construir y que todos sus pelitos procedían de auténtico pelo de caballo.

 Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston

Pero justo una semana antes de empezar el rodaje un problema de salud hizo que Stuart Gordon tuviera que dejar la silla de director. Aunque también se comenta que fue más una cuestión de que a Disney no le hacía mucha gracia que un director y un productor de serie B, y para más inri conocidos por sus films gore, estuvieran relacionados con una producción del tito Walt y les dieron la patada.

La dirección acabó en manos d
e Joe Johnston, que había sido técnico de efectos y director de producción en la Industrial Light and Magic, que era su primera película como director y que luego se especializó en producciones grandilocuentes como Jumanji, Jurassic Park 3, The Wolfman (la de Benicio Del Toro, que aún no se ha estrenado) y se dice que podría hacer el nuevo Capitán América.


Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston


La película empieza bastante bien con unos títulos de crédito animados que, como único pero, te explican en cinco minutos la película que estás a punto de ver.
Una vez que nos metemos en materia tenemos a Rick Moranis, el clásico científico despistado que trabaja en su buhardilla en la construcción de una máquina capaz de miniaturizar las cosas. Pero la máquina no acaba de funcionar, aunque todos sabemos que sí lo hace porque si no no habría película.
Una pelota de baseball, lanzada por el hijo de su vecino, acabará entrando en su buhardilla y accionando la máquina que acabará encogiendo a sus hijos y a los de sus vecinos cuando vayan a buscar la pelota. Pero esto no ha hecho más que empezar porque el profesor, sin saber que su máquina funciona, barrera el suelo de la buhardilla donde están los chavales y los tirará a la basura. Así que la única opción que les queda a los diminutos niños es atravesar todo el jardín e intentar llegar a casa, sabiendo que para ellos la pequeña parcela de césped se ha convertido en una temible jungla

La película no cuenta con grandes nombres a excepción de Rick Moranis que, aunque parezca mentira, se retiró del mundo del cine a finales de los 90 y que sólo ha doblado alguna cinta animada como las dos partes de Hermano oso, según él porque sacó tanta pasta con la saga de Cariño, he encogido a los niños que prefirió quedarse en casa y estar con su familia.

Otra cara más o menos reconocible es la de Jared Rushton, más recordado por ser el amiguete de Tom Hanks en Big.
Como curiosidad decir que Kimmy Robertson
, la Lucy de Twin Peaks, tiene un minúsculo papel.

 Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston

Está peli la vi en su estreno (verano del 89) en Palamós, no sé si en el cine Arinco o en el Kyton (triste pero cierto), hoy en día convertidos a multisalas y que son los dos únicos cines que tiene la localidad desde hace décadas. Y como para todo el que fuese un chavalín en esa época ir al cine era toda una sensación, y más cuando te metías a ver una peli que prometía efectos especiales, aventuras, monstruos horripilantes (en este caso bichos); y si encima antes de empezar la proyección te pasaban el corto Dolor de barriga con Roger Rabbit es que algo iba a pasar. Se comentaba que Disney no estaba muy contenta con la película (era una época que el término "película familiar" no vendía) y, además, estrenaban el mismo día que el Batman de Tim Burton y por eso añadieron el corto de Roger Rabbit.

Y realmente no pasó nada, pero la peli estaba bien distraída. Tiene muchísimo ritmo, sus escasos 90 minutos pasan en un santiamén sin dar tiempo al aburrimiento. Los niños, a excepción del irritante Jared Rushton
, no molestan nada, e incluso el hijo gafotas del científico mola mucho.
Todos los decorados gigantescos cumplen con nota y los trucajes a la vieja usanza no desentonan en absoluto. La única excepción son las escenas rodadas en pantalla azul, que ahí se que cantan, pero por fortuna son muy poquitas y en tomas cortas.
Siendo una producción familiar y estando Disney detrás no podían faltar los momentos babosos, pero que se dejan ver, o incluso los lacrimógenos con la muerte de la hormiga (que en el guión original no sólo no moría, si no que al final del film aparecía transformada al tamaño de un pony), cosa que hacía que cuando salíamos del cine dijéramos que no pisaríamos más bichos, pero al día siguiente se nos pasaba y volvíamos a tirar piedras a las sargantanas.

 Cariño, he encogido a los niños, Rick Moranis, Disney, Joe Johnston

El éxito de la película (más de 200 millones de dólares) propició que en el 92 se estrenara por todo lo grande la secuela,
Cariño, he agrandado al niño (que tuve la desgracia de ver en el extinto cine Niza), que intentaba ir más allá y ser más espectacular rodando en exteriores, con escenas de masas y apagando las luces de media Las Vegas, pero que fracasaba vilmente siendo más aburrida y los efectos cantaban muchísimo, precisamente porque muchos se basaban en pantalla azul. No debieron tener suficiente porque luego vino la atracción para los parques de atracciones Disney (Cariño, he encogido a los espectadores), una tercera parte directamente a vídeo (Cariño, nos hemos encogido nosotros mismos, 1997) y una horripilante serie para el Disney Channel.


lunes, julio 06, 2009

Burton attacks!

Tim Burton
Más grabaciones de los VHS.
A principios del 97 Tim Burton iniciaría su decadencia con el estreno de Mars attacks!, luego tuvo cierto amago de resurgimiento con Sleepy Hollow, pero que se quedó ahí.
Vamos a lo que vamos. Hoy nos toca un fragmento del programa Días de cine, antes de que se hiciera famoso por las puntillas de Gasset, del 1 de marzo de 1997 donde hablan del estreno de Mars attacks! y hacen un pequeño analisis de la filmografía del director en un microrreportaje llamado El mago de los sueños (El fabuloso mundo de Tim Burton) firmado por Sergi Sánchez y Rosa Pérez Roa.


viernes, julio 03, 2009

Thriller A Cruel Picture

Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Quizá los más despistados de lugar no lo sepan (pocos deben quedar ya) pero este Thriller A Cruel Picture es la película de la que más chupó Tarantino para el díptico de Kill Bill, aunque en muchos sitios reseñaban (incluso el inefable Juan Carlos Gallardo me dio la chapa con ello) que se había basado en La novia ensangrentada de Vicente Aranda. Pero naranjas de la China, de la peli de Aranda como mucho cogería el concepto de una mujer en traje de novia bañada de sangre (coño que el título ya lo dice), pero nada más.Thriller A Cruel Picture es una peliculita sueca del 73 que estaría catalogada dentro del género exploitation vengativo, es decir, personaje al que joden hasta que se le inflan los machos y acaba desquiciado hasta que se carga a sus instigadores.

Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Aquí nos encontramos Madeleine, que de pequeñita sufrió una violación (escena rodada de una forma muy metafórica) y del trauma se quedó muda. Ya de adulta vive con sus padres en su granja mientras vende leche a granel. Un buen día se encuentra a un chulapo en la parada del autobús. El lechuguino farda de coche y la engatusa para que se suba con ella, que le va a dar una vuelta, le dice, que su buga es grande y potente. El tipo, uno de esos señores malos que cambian las etiquetas de los precios en el super y no devuelve las llamadas a sus amigos, la lleva a cenar y le da palique, y con el rollo de ir a su casa hacer la última copa la droga hasta dejarla insconsciente. Mientras tanto se dedica a inyectarle heroína para hacerla adicta (una cosa parecida a la que le hacían a la Audrey de Twin Peaks). Y una vez que se despierta le dice que se tiene que prostituir, a cambio él le dará dinero y le proporcionará las dosis de droga.

Pero la tipa no está muy por la labor, así que al primer cliente no se le ocurre otra cosa que clavarle las uñas en la cara. Como castigo, el proxeneta, le clavará un cuchillo en el ojo como el que le mete la puntillica a una aceituna rellena de anchoa; y no contento con eso le obliga a firmar unas cartas que él mismo ha escrito para enviarlas a los padres de Madeleine, diciendo que han sido unos papas muy malos y se larga a buscarse la vida en saber donde. Los yayos muy afectados por la misiva se suicidan, cosa de la que Madeleine se entera.


Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Así que después de le hayan dado por el culo (tanto literal como metaforicamente) la tipa ya dice "te vas a cagar, cabrón"; y en su tiempo libre se dedica hacer clases de conducción, defensa personal y tiro al blanco; y una vez que ya lo tiene todo controlado comenzará a cargarse a todos los que le han dado por la retaguardia.

Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Bo Arne Vibenius, el director, guionista, productor y lo que haga falta, se propuso hacer un exploitation puro y duro, que es lo que triunfaba en la época, lo suficientemente impactante para que destacase sobre los demás, con la única intención de sacar cuanta más pasta mejor, entre otras cosas porque su anterior y primera película (sólo ha rodado 3), una comedia, fue un estrepitoso fracaso. Y tanto ímpetu le puso al asunto que la película estuvo prohibida en su propio país, Suecia, y en otros muchos lugares estaba amputada 20 o 30 minutos.
Más que por su violencia su censura fue producto de la escenas porno donde vemos unos primerísimos planos de no hace falta decir que.

Aunque
Christina Lindberg, la protagonista, se había iniciado en sesiones fotográficas soft de la mano de Penthouse y Playboy, los primeros planos porno no los rodó ella, si no una doble, aunque no tuvo problemas a la hora de salir desnuda en el film.

Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Como ya he dicho antes Tarantino sacó elementos de esta peli, el más destacable, aparte de todo el factor venganza, la protagonista con el parche en el ojo, que va cambiando para que combine que el resto de sus modelitos.

Como buen exploitation la peli luce medios muy justitos, pocos actores, localizaciones excesivamente despobladas y coches que explotan porque sí a lo
Piquer Simon style. A eso añadamosle cámaras lentas a tutiplén que remiten a Peckinpah.
Bastante más logrado está el plano estético, aunque tampoco hay que darle mucho más merito que el haberla rodado en su época; el que ahora esa ropa, la fotografía y demás luzcan chanantes es virtud de su tiempo y época. Y que Bo Arne Vibenius debió aprender algo después de rodar con Bergman.

Algo de sangre tiene, no mucha todo hay que decirlo. Quizá la escena más gráfica (aparte de las escenas pornográficas) es el acuchillamiento del ojo estilo
Un perro andaluz, que según la leyenda que corre Arne Vibenius usó el cadáver de una persona para rodarla. Cosa que confirmó Christina Lindberg en una entrevista hace poco, según ella la escena se rodó en un hospital y el cuerpo era de una chica que se había suicidado.

Thriller A Cruel Picture, Christina Lindberg, Bo Arne Vibenius,
Con todo es una película muy pausada, que se toma su tiempo en explicarlo todo y cuando ya han pasado tres cuartos de película es cuando vemos la venganza, que no deja de ser bastante secota y poco espectacular en cuanto a vísceras y sangre, reduciéndose todo a simples disparos en el pecho y la carga de sangre haciendo explosión. Y bastante curiosa la forma de rodar el final, con un estilo puramente westeriano, no casualmente acontece en un escenario practicamente desierto, donde sólo faltan los planos de miradas tan conocidos de Leone. Y encima, como guinda, tenemos la ejecución de la venganza final lo suficientemente cabrona aunque no lleguemos a ver el elemento más gore y morboso.